Durante el camino estuvimos en
silencio absoluto. Hasta que Harry lo rompió.
-
Se pondrá bien. Tranquila.
-
Me gustaría estar tan segura como tú… ¿Cómo… como ha pasado todo?
-
No lo sé, todo ocurrió muy rápido. En el momento
en que llamaron a Louis fuimos a avisarte.
-
Gracias… -llegamos y Harry aparcó en la puerta
del edificio. –Harry, quédate conmigo. Por favor. –él me sonrió y se bajó del
coche para abrirme la puerta. Subimos y entramos al apartamento. En aquel
momento recordé algo.
-
Siéntate. Tengo que hacer una cosa. –le avisé a
Harry. Me adentré en la habitación y tomé mi teléfono móvil. Pulsé el número de
mi madre y en unos instantes este estaba sonando.
-
¿diga? –dijo su voz al otro lado del teléfono.
-
Mamá… -mi voz estaba ronca a causa del llanto.
-
Oh, cariño… ¿Cómo está Diana? Melisa me lo ha
contado todo…
-
Está mal mamá –no pude evitar comenzar a llorar
de nuevo. –nunca creí que la vería así.
-
Hija, no sabes cuánto lo siento… me gustaría
estar allí, pero no puedo. No en este momento.
-
¡Pero es tu hija! Te necesita.
-
______, no puedo. Entiéndeme.
-
¡No! ¡Yo no puedo entender eso! –exclame furiosa
antes de colgar el teléfono. Puse las manos en mi rostro y comencé a sollozar.
Sentí que alguien estaba a mis espaldas.
-
Por favor, no llores.
-
Yo no entiendo nada, Harry. No sé que he hecho
para que me pase todo esto… -Me di la vuelta y me encontré frente a Harry. Lo
abracé fuertemente y él me correspondió.
-
Cuenta conmigo para todo lo que necesites. –tomó
mi barbilla y nuestras miradas se cruzaron. Poco a poco se fue acercando a mí
hasta que juntamos nuestros labios. Nos separamos y limpió mis lágrimas.
-
Te necesito a ti. –dije antes de besarlo de
nuevo.
Mientras tanto en el hospital…
Narra Louis
Diana, mi pobre Diana… no
entiendo porque estas cosas tienen que ocurrir. Hoy todo es alegría y
tranquilidad y mañana todo es oscuro y nefasto. Me dolía en el alma observarla
en ese estado. Me acerqué a ella y tomé su débil mano.
-
Te pondrás mejor, pequeña. Sé que lo harás. –di
un suave beso en su mejilla. De un momento a otro el monitor cardiaco comenzó a sonar
aceleradamente. Esos pitidos pasaron de ser tranquilos a ir cada vez más
acelerados. Salí rápidamente al pasillo y observé a los chicos que se
levantaron al verme tan agitado.
-
¡chicos! ¡Necesito un médico! –comencé a gritar
desesperado. -¡por favor! ¡un médico! –en cuestión de segundos apareció un
hombre con bata y dos enfermeras siguiéndole. Se adentraron en la pequeña
habitación y cerraron la puerta. Yo no podía ver lo que estaba sucediendo. Eso
me frustraba más. Después de bastante tiempo esperando, salió el médico seguido
de una de las enfermeras, que se retiró dejando al hombre solo, delante de
nosotros.
-
¿Sois familiares de la paciente? –todos
asentimos. –tengo que informaros de un asunto delicado… Necesito que uno de
vosotros venga conmigo. –todos me miraron a mí, por lo que fui yo el que
acompañó al doctor a su despacho.
-
¿Qué está pasando? –pregunté.
-
Esto es un tema delicado, joven. La paciente ha
sufrido graves lesiones alrededor del cerebro, en concreto, hemos detectado un
hematoma en este lugar y… -el doctor dejó de hablar.
-
¿¡Y qué!?
-
Ha entrado en estado de coma.
-
¿Có…cómo? –mi voz temblaba. No podía creer lo
que acababa de escuchar. –No, no puede ser. ¡Debe de haber una equivocación!
Por favor…
-
Por favor, tranquilízate. Lo que te digo es
totalmente cierto.
-
Pero… a Diana no le puede estar pasando esto.
¡No! ¡A ella no!
-
Lo siento… solo nos queda esperar, pueden pasar
semanas, meses e incluso años y quizás ella siga durmiendo. O tal vez despierte
mañana mismo. Es imposible saberlo con certeza. –se levantó y abrió la puerta.
–Vamos, debemos comunicárselo a tus amigos. –me levanté y lo seguí.
…
Narra ______:
-
Te necesito aquí a mi lado. –Creo que por fin mi
orgullo y yo nos habíamos separado.
-
Yo también. No puedo seguir engañándome. –dijo
Harry sonriendo. ¿Entonces…
-
¿Entonces… -le incité yo a seguir su frase.
-
¿Quieres que… ya sabes… estemos juntos? –creo
que en ese momento me sonrojé como nunca. Obviamente era lo que quería. Solo
que no me lo esperaba, así que lo que hice fue abrazar a Harry y esconder mi
sonrojo en su cuello. Sentí como el rió.
-
¿Qué pasa?–dijo emitiendo una sonrisa.
-
Es que… me da vergüenza… -estaba demasiado
nerviosa, lo único que hacía era morder mis uñas.
-
Bueno, entonces me voy. –dijo bromeando.
-
¡No! Quiero decir ¡sí!... un momento ¡no! –me
estaba haciendo un lío. –lo que quiero decir es que no te vayas… quiero estar
contigo. –sonreí.
-
¿Eso es un sí?
-
Obviamente. –Harry se acercó a mí y acabamos
aquel momento con un beso.
…
Narra Louis:
-
Creo que es mejor que sea su hermana la que les
dé la noticia. –le dije al doctor.
-
De acuerdo. Si me necesitáis estaré en mi
oficina, yo seré el doctor que atienda el caso de tu novia.
-
No… no es mi novia, ¿podemos pasar a verla?
-
Yo os recomiendo que vengáis mañana, Diana está
muy débil en este momento.
-
Bueno, está bien. Hasta luego- me despedí del
doctor y me dirigí hacia donde se encontraban los chicos. No diría nada, sería
mejor esperar a que ______ hablara.
-
¿Qué te han dicho? –preguntó María rápidamente
cuando me vio llegar.
-
Eh… -no sabía que decirles en aquel momento. –está
muy débil, pero…
-
Habla Louis.
-
Será mejor que os lo cuente ______cuando lo
sepa. Me voy a buscarla, adiós.
Harry se había
llevado el coche, tendría que ir en taxi… ¿Qué más tiene que ocurrir hoy? Como pude
me tapé para pasar desapercibido y conseguí subirme en un taxi rápidamente. Iba
sumergido en mis pensamientos hasta que el conductor me avisó que habíamos
llegado. Le pagué y bajé del vehículo. No tenía ni idea de cómo darle la
noticia a ______. Esto era muy duro, quería ser fuerte, pero si las cosas se
ponían peor me derrumbaría. Toqué el timbre y me abrió Harry, parecía contento.
-
Hey, Lou, ¿Qué te trae por aquí? ¿y por qué esa
cara?
-
¿Dónde está ______? Tengo que hablar con ella,
es urgente.
-
Se está duchando. ¿Pero qué ha pasado?
-
A ti no puedo ocultártelo. Siéntate por favor,
esto es serio.
-
Louis, me estás asustando, dímelo.
-
Diana… ha sufrido golpes muy graves en la cabeza…
en este momento está… -me quedé callado un instante. Sentía la mirada de Harry atenta
a todo lo que mi boca pronunciaba.
-
¿¡qué pasa, Louis!?
-
Está en coma.
-
¿¡Qué!? –creo que una tercera persona se había
unido por accidente a la conversación.
…
Narra ______:
Acababa de salir
de la ducha. Mientras me vestía tarareaba una canción. ¿Estaba feliz? Puede ser.
Me peiné y sequé el cabello y estaba a punto de salir de la habitación cuando
oí que alguien llamó a la puerta. Mi instinto me dijo que no saliera, así que
me quedé escondida escuchando y observando la conversación. Era Louis, y
parecía realmente preocupado. Oí que le preguntó a Harry donde estaba yo. Luego
se sentaron, estaban susurrando algo. Harry se exaltó porque Louis no terminaba
de contar lo que estaba diciendo y segundos después sentí como todo lo que me rodeaba
se derrumbaba de golpe.
-
¿¡Qué!? –pregunté sintiendo como las lágrimas
comenzaban a salir de mis ojos. Harry se
levantó del sofá nada más notar mi presencia y fue a rodearme con sus brazos
mientras yo estaba inmóvil.
-
Lo siento, ______. De verdad no quería que te
enteraras así. Tú hermana está muy mal. –dijo Louis. Él no tenía la culpa de
nada, me separé cuidadosamente de Harry y fui a abrazar a Lou.
-
¿Por qué, Louis? Por más que lo intento, no
consigo entender porque le tiene que ocurrir esto a ella.
-
Tranquila, estamos contigo. –dijo refiriéndose a
Harry y a él. –verás como saldremos de esto.
-
Tenemos que ser fuertes por ella, ______. –añadió
Harry.
-
¿Los demás ya lo saben? –pregunté secándome las
lágrimas en vano.
-
No, es mejor que seas tú la que hable. –en ese
momento sonó el timbre. Le pedí a Louis que abriera, yo me senté en el sofá con
Harry y apoyé la cabeza en su hombro.
-
Gracias- susurré. –gracias por estar aquí
conmigo.
-
Siempre lo estaré. –sonrió acariciándome el
pelo. Todos los chicos, incluidas María y Daniela, entraron y dirigieron su
mirada a mí.
-
Por favor, cuéntanos lo que está pasando. –rogó Liam,
que se acercó a mí, se agachó y tomó mi mano.
-
A diana le han diagnosticado un coma. –dije como
pude, la voz casi no me salía en aquel momento.
-
Dio mío. –dijo Daniela llevándose una mano a la
boca. Todos se quedaron mudos.
-
Estamos contigo ______. Debemos ser fuertes. –dijo
Niall rompiendo el silencio.
-
Sí, por Diana. Estoy seguro de que a ella no le
gustaría vernos derrumbados. –añadió Zayn. Les sonreí a todos y formamos un
gran abrazo de grupo. Estos pequeños detalles eran los que hacían que todo lo
que estaba pasando no fuera tan duro. Nunca pensé que estos chicos y yo
seríamos amigos, es algo irreal.
Todos nos
quedamos en mi casa hasta que llegó la tía Melisa y le dimos la noticia. Al contrario
que mi madre, ella si se preocupó por Diana e insistió en ir a verla, pero la
pobre estaba agotada así que le dije que iríamos mañana. Obligué a mi tía a
irse a dormir, y a los chicos a su casa. Al principio todos se resistieron,
pero luego los convencí. A todos menos a Harry, él no quería irse de ninguna
manera. Así que le dejé quedarse con permiso de mi tía. Aún nadie sabía de lo
nuestro, todavía no era el momento adecuado para hablar de ello. Me despedí de
los chicos prometiéndoles que mañana iríamos todos a ver a Diana. La tía Melisa
se marchó a dormir y Harry y yo nos quedamos sentados en el sofá en silencio.
-
¿En qué piensas? –me preguntó curioso.
-
En mi madre, todavía no sabe nada. –me acerqué a
él y me recosté en su hombro.
-
Hablaremos con ella mañana, tranquila.
-
¿Hablaremos?
-
Claro, te dije que estaría contigo en todo.
-
Te quiero. –levanté mi cabeza y lo miré a los ojos.
-
Yo más, ven aquí. –tomó una manta y los dos nos
acurrucamos terminando dormidos en el sofá.
He aquí la continuación del capítulo 16 :) Muchísimas gracias por la espera, y espero que haya valido la pena ;) La semana que viene subo el siguiente! ^^ besoss Atte: Daniela xx:)
Perdón si soy pesada pero me gustaría que comentaseis los capítulos (las que no lo hacen) es bueno saber la opinión de la gente. Gracias :)